El concepto de una persona sobre quién es y cómo se relaciona con el mundo real forma su identidad y se expresa a través de su personalidad. Los psicólogos especializados en las diferencias individuales parten de la hipótesis de que cada persona tiene autoestima y quiere desarrollar la conciencia de ella misma y su manera de relacionarse con lo que le rodea. Con tiempo, la identidad puede evolucionar y desarrollarse un concepto de sí mismo más fuerte, llegando a alcanzar la autorrealización.

La formación de la identidad empieza en la niñez, en la adolescencia se pone a prueba a medida que el joven explora su papel en el mundo y su autoconcepto, y se desarrolla en la etapa adulta.
Por su parte, la personalidad consiste en una serie de patrones característicos de pensamientos, emociones, motivaciones y conductas que determinan cómo una persona se ve a así misma, a los demás y al entorno que le rodea. Esto decide la forma en que se siente, cómo piensa, qué quiere y cómo se comporta. La personalidad es lo que hace que cada persona sea única e influye en todas las áreas de la vida, desde sus relaciones interpersonales a su carrera profesional.
El modelo de personalidad de los Cinco Grandes es el más aceptado por los psicólogos y propone que esta consta de cinco dimensiones o rasgos principales. Cada personalidad individual se encuentra en algún punto del espectro de estas cinco áreas.
RASGO: APERTURA
Imaginación, perspicacia.
BAJA PUNTUACIÓN: práctico, inflexible, prefiere la rutina, convencional.
ALTA PUNTUACIÓN: curioso, creativo, aventurero, abierto a conceptos abstractos.
RASGO: RESPONSABILIDAD
Consideración, competencia, control de impulsos y creación de objetivos.
BAJA PUNTUACIÓN: impulsivo, desorganizado, no le gusta la estructura, despreocupado.
ALTA PUNTUACIÓN: fiable, trabajador, organizado, detallista.
RASGO: EXTROVERSIÓN
Sociabilidad, asertividad y expresividad.
BAJA PUNTUACIÓN: callado, introvertido, reservado, prefiere la soledad.
ALTA PUNTUACIÓN: extrovertido, elocuente, afectuoso, amigable, hablador.
RASGO: AMABILIDAD
Cooperación, fiabilidad, altruismo y bondad.
BAJA PUNTUACIÓN: crítico, no colabora, insolente, manipulador.
ALTA PUNTUACIÓN: servicial, empático, confiado, amable.
RASGO: NEUROSIS
Calma y estabilidad emocional.
BAJA PUNTUACIÓN: tranquilo, seguro, emocionalmente estable, relajado.
ALTA PUNTUACIÓN: ansioso, se disgusta fácilmente, infeliz, estresado, malhumorado.

Julio García | Psicólogo en Valencia
Me llamo Julio García y soy psicólogo en Valencia. Te ayudaré a sentirte mejor si tienes problemas de ansiedad, pareja, autoestima, indecisión o depresión.